martes, 13 de mayo de 2014

¿Quienes somos?

Somos un Programa del Instituto Madrileño de la Familia y Menor, para jóvenes de entre 16 y 18 años que se encuentran en centros de protección de menores y que necesitan desarrollar un proceso de inserción laboral.

En el Programa Junco, partimos de la idea de que la inmersión de los jóvenes en una cultura del trabajo, supone un elemento estabilizador, normalizador de su realidad vital. Para muchos de ellos la incorporación al mundo del trabajo, la consecución de su primer empleo y el mantenimiento del mismo, constituye el eje central sobre el que girará su proyecto de tránsito a una vida adulta equilibrada, responsable e independiente.

Metodología
Centralidad en la persona

Entendemos que son los adolescentes y jóvenes, chicos y chicas, los encargados de diseñar su propio itinerario y tener el protagonismo en lo que se refiere al proceso de inserción social.
Si en otros espacios son los jóvenes los que aprenden y los que tienen que ser enseñados, en los Programas de Opción3 son ellos y ellas los que tienen la palabra, la capacidad de hablar y decidir lo mejor para su futuro.

Los técnicos de los Programas escuchamos y animamos a iniciar un itinerario, a que el joven proyecte lo que quiere hacer con su vida contando con la mayor información posible para que la decisión sea una elección pensada y valorada.

La figura por tanto es de mediador, de facilitadores de aprendizajes.
Por lo tanto las actividades y la formación que llevamos a cabo están centradas en sus intereses y necesidades, de manera que sean significativas y valiosas para ellos y ellas.

Cultura del trabajo

Para favorecer una inserción social es una condición indispensable una adecuada inserción laboral. Confiamos en las posibilidades del trabajo como vertebrador y organizador de la vida de los jóvenes, puesto que aporta unos beneficios inéditos en otros medios.

El acceso a un puesto de trabajo y el mantenimiento del mismo aporta al joven entre otras cosas:

Un adecuado poder adquisitivo
Autonomía y crecimiento personal
Reconocimiento social

El trabajo ayuda a organizar la vida del adolescente y con él empieza a vertebrar su tiempo en torno a una ocupación con sentido.
Con el trabajo el joven además dispone de un medio con el que puede ingresar en el mundo adulto de forma natural e incorporar los valores hasta ese momento lejanos, como la responsabilidad, la participación, la convivencia etc.
Aumenta su autoestima, se descubren potencialidades, y le ayuda a vencer miedos adolescentes.
Permite al joven mirar hacia adelante y planificar su futuro.

Flexibilidad

En los últimos años muchas corrientes teóricas ponen en duda la trayectoria lineal de incorporación a la vida adulta.
Términos como el de transición, trayectorias flexibles, trayectorias tipo yo-yo, se refieren a la idea de la reversibilidad en la inserción sociolaboral.

La Comisión Europea en el Libro Blanco “Un nuevo impulso para la Juventud Europea” (2001) recoge tres importantes desafíos cuando se habla de la juventud:

1º. La Juventud dura más tiempo. Bajo la presión de factores económicos y socioculturales los jóvenes alcanzan de forma tardía las diversas fases de la vida (finalización educación formal, acceso al mercado de trabajo, formación de una familia, etc.)

2º. Los itinerarios vitales son de carácter no lineal. Los roles vitales se vuelven confusos, y se puede ser a la vez estudiante, tener responsabilidades familiares, tener empleo, buscar trabajo y vivir con los padres. Los itinerarios vitales se vuelven menos lineales porque la sociedad no ofrece las mismas garantías que antes (estabilidad laboral, prestaciones sociales, etc)

3º. Los modelos colectivos tradicionales van perdiendo terreno dado que las trayectorias personales están cada vez más individualizadas.
Estos planteamientos nos animan a introducir la flexibilidad como elemento metodológico y asumir la inserción sociolaboral como proceso y no como estado definitivo en el que cada joven irá diseñando su propia biografía, acompañado y acompañándose por otros, sin recetas mágicas ni patrones establecidos.

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